UN ESPACIO VOCACIONAL DESDE LA PASCUA
. La pascua es un tiempo propicio para preguntarle a Jesus que quiere de nosotros y dejar que la fuerza del Resucitado motive la totalidad de nuestra vida para tomar desiciones valientes, de esas que tienen que ver con el arriesgar nuestra propia pida y comprometerla con el servicio a su Reino.
Permitete en este tiempo de pascua hacer espacios de oracion desde los Evangelios de la octava de Pascua y dejar que el mismo Resucitado que hablo a las mujeres y a los discipulos confirme tu vocacion y te haga sentir la necesidad que El tiene de enviar hoy tambien a jovenes valientes a gritar al mundo que El esta resucitado.
ORACION. Pide al Espiritu santo en un momento de silencio te de luz para hacer silencio y encontrarte con Jesus desde el evangelio de Mateo.
MEDITACION. Lee atentamente el texto y trata de ponerte en el lugar de las mujeres. Dejanto un momento de silencio mientras dejas que la palabra penetre en ti.
Lectura del santo evangelio según san Mateo (28,8-15):
En aquel tiempo, las mujeres se marcharon a toda prisa del sepulcro; llenas de miedo y de alegría corrieron a anunciarlo a los discípulos.
De pronto, Jesús salió al encuentro y les dijo: «Alegraos».
Ellas se acercaron, le abrazaron los pies y se postraron ante él. Jesús les dijo: «No temáis: id a comunicar a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán».
PARA ORAR EN SILENCIO
- Como joven, cuales son mis motivaciones, cuales son las cosas que en este momento me hacen correr a prisa, es decir, las mas urgentes para mi en el hoy de mi vida.
- Jesus resucitado quiere hacerse presente a cada hombre y cada mujer desde su situacion actual, como lo experimento yo?
- Como caen a mi corazon las palabras de Jesus: alegraos? y desde que realidad la vivo?
- Jesus envia a las mujeres a comunicar a sus hermanos que ha resucitado, diciendoles, no teman. Cuales son mis miedos ante lo que Jesus me pide a mi?
OREMOS
Jesus, que te apereciste a las mujeres en el sepulcro
desde su realidad de desanimo, de tristeza y al mismo tiempo en su deseo de llevar la noticia de tu resurreccion, concedenos a nosotros, jovenes de hoy, dejarnos encontrar por ti desde la realidad de cada uno, para experimentar tu llamado y tu deseos de hacernos colaboradores en el anuncio de tu Resurreccion, y libres de todo miedo y desanimo podamos con valentia ser los instrumentos de tu Reino que el mundo hoy necesita. Amen.