TU RESPUESTA ES TU PENTECOSTES
Tomarte la
vida en serio es un sueno de Dios, un don del Espíritu que te creo no por pura
casualidad, sino por una transcendental razón, y es precisamente la suave brisa, el fuego que arde y quema, el
viento que empuja, quien puede dar a tu vida el giro que necesita, la misión
por la que estas en este mundo y en este tiempo de la historia.
PENTECOSTES ES LA OPORTUNIDAD DEL DISCERNIMIENTO. QUE QUIERE DIOS DE TI,
ESPIRITU SANTO, QUE ESTAS HACIENDO EN MI? QUE ESTAS DESPERTANDO EN MI INTERIOR?
A DONDE ME LLEVAS?
SILENCIO..
ORAMOS CON EL SIGUIENTE TEXTO:
Lectura del libro de
los Hechos de los Apóstoles (2,1-11):
AL
cumplirse el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar. De
repente, se produjo desde el cielo un estruendo, como de viento que soplaba
fuertemente, y llenó toda la casa donde se encontraban sentados.\
Lo
primero y necesario es ponerte en actitud de escucha, de apertura, de búsqueda,
de oración y preguntándole a Dios, que quieres de mi. La actitud intensa que
desde sus miedos y limitaciones tuvieron los discípulos, junto con María en
PENTECOSTES.
María,
madre de la Iglesia ven a orar conmigo, y llévame a la seria búsqueda de mi misión.
Meditamos!
Vieron
aparecer unas lenguas, como llamaradas, que se dividían, posándose encima de
cada uno de ellos. Se llenaron todos de Espíritu Santo y empezaron a hablar en
otras lenguas, según el Espíritu les concedía manifestarse.
Deja
que el Espíritu Santo sea el fuego que arde en ti, que queme tus miedos,
comodidades y seguridades y permite que fluya. Esa inquietud interior es el
fuego que viene a posarse en ti, dejándote inquieto para responder a una misión.
Meditamos!
Residían
entonces en Jerusalén judíos devotos venidos de todos los pueblos que hay bajo
el cielo. Al oírse este ruido, acudió la multitud y quedaron desconcertados,
porque cada uno los oía hablar en su propia lengua. Estaban todos estupefactos
y admirados, diciendo:
«¿No son galileos todos esos que están hablando? Entonces, ¿cómo es que cada uno de nosotros los oímos hablar en nuestra lengua nativa? Entre nosotros hay partos, medos, elamitas y habitantes de Mesopotamia, de Judea y Capadocia, del Ponto y Asia, de Frigia y Panfilia, de Egipto y de la zona de Libia que limita con Cirene; hay ciudadanos romanos forasteros, tanto judíos como prosélitos; también hay cretenses y árabes; y cada uno los oímos hablar de las grandezas de Dios en nuestra propia lengua».
«¿No son galileos todos esos que están hablando? Entonces, ¿cómo es que cada uno de nosotros los oímos hablar en nuestra lengua nativa? Entre nosotros hay partos, medos, elamitas y habitantes de Mesopotamia, de Judea y Capadocia, del Ponto y Asia, de Frigia y Panfilia, de Egipto y de la zona de Libia que limita con Cirene; hay ciudadanos romanos forasteros, tanto judíos como prosélitos; también hay cretenses y árabes; y cada uno los oímos hablar de las grandezas de Dios en nuestra propia lengua».
Entonces
sentirás que tu corazón se ensancha y ya no podrás quedarte indiferente ante
tantas realidades oscuras de nuestro mundo, que te hará capaz de trascender
razas y culturas, porque la respuesta vocacional te abre al mundo entero, al
universo y te hace descubrir el actuar de Dios en todos los rincones de la
tierra.
Meditamos!